sábado, 26 de junio de 2010

Sueño inventado e interpretación más inventada aún




Analizaremos un sueño que presentó los siguientes elementos: dado, homicidio, piedra, verde, naipes, mostaza, cuna, huesos, espejo, césped, cangrejo.

Yo estaba sentada en el césped de un parque, rodeada de enormes naipes vivientes. Uno de ellos me lanzó un dado azul con estrellas a los costados. Parecía un diario, pues tenía fecha y escrita, la narración de un homicidio. Caminé por el lugar y encontré una cuna, que en lugar de tener a un bebé tenía una piedra. Yo estaba consciente de dónde estaba, pues me parecía un lugar familiar, sin embargo, el color verde de la mostaza me extrañó; así que la tomé de la raíz y la lancé al horizonte, que de pronto estaba vacío. Sentí una fuerte ráfaga de viento que rozó mi cara, y al abrir los ojos estaba en una habitación negra, pisando una pila de huesos humanos. Aterrorizada, intenté salir del lugar, pero no había salida. De la nada apareció un espejo, intenté meterme en él, pero me sorprendió aún más ver que mi reflejo era un cangrejo gris. Me desvanecí del horror y en eso desperté.

Interpretación:

Cecilia quedó viuda poco después de casarse, el sueño demostraba su miedo al cambio (piedra) y también había muchas señales de inseguridad e insatisfacción, así como el deseo de dar marcha atrás (cuna, cangrejo). Generalmente, en los sueños se representa el subconsciente o la parte oculta de nuestra personalidad o la situación en la que nos encontramos. El estar sobre una pila de huesos representa tristeza y pérdida de esperanza, igual que con el color verde, que representa a su vez muerte, desilusión e inseguridad. La mostaza que Cecilia arranca y lanza al horizonte son molestias e inconformidades que desea desechar, lo que también vemos en el homicidio, que significa deshacerse de lo que no nos gusta. Todos los juegos de azar que aparecen en los sueños (que en este caso son los dados y los naipes, significan el masoquismo de la persona, el dejarse arrastrar por los acontecimientos sin hacer nada). Por último, la forma en como uno se ve en el espejo, representa las cualidades o defectos de la persona de forma exagerada.